¿Por qué la música en directo es el territorio con mayor conexión emocional para las marcas?

Los conciertos y festivales no serían lo que son sin las marcas que apuestan por ellos en sus diferentes ediciones a nivel anual y viceversa. Buscando conectar cada historia y su filosofía con los asistentes, las marcas se posicionan como elemento clave en la música en directo para acercarse a un público diverso, estrechar lazos y generar vínculos dignos de ser recordados por mucho tiempo.

Si bien las marcas de bebidas (Coca-Cola, Red Bull, Mahou) ocupan el 50% de los patrocinios en festivales de música, desde hace unos años se empieza a hacer más evidente la presencia de otros nombres y sectores en estos: El mundo de la estética y la limpieza (Maybelline, Sephora, Dyson), las inmobiliarias (Idealista), los automóviles (Seat, Volkswagen) y los cigarrillos electrónicos como Vuse o Blu, entre otros. En ocasiones, la importancia del patrocinador es tal que los festivales llevan su nombre integrado, como es el caso del Axe Ceremonia en México o Coca-Cola Music Experience en Madrid.

Las marcas y los festivales: De activaciones a recuerdos permanentes

¿Qué tiene la música en directo que la convierte en el territorio idóneo para el desarrollo de las marcas? Ya sea un concierto en un formato más reducido o un macro-evento multitudinario, estas experiencias en vivo se caracterizan por aspectos como la inmediatez y la autenticidad, las emociones que provoca la música en los asistentes, el sentimiento de pertenencia que estos tienen en el momento y la oportunidad para generar historias únicas.

Dejando atrás los logos, las marcas apuestan por experiencias que añadan un valor emocional buscando conectar con el público a través de activaciones diferenciales mediante juegos, sorteos o el muestreo de productos de manera gratuita. Si bien el cartel de un festival es el principal atractivo para cualquier amante de la música, las marcas que podemos encontrar en ellos son las encargadas de añadir ese disfrute extra a las cálidas noches de verano -y en cualquier momento del año, a decir verdad- viendo a nuestros artistas y bandas favoritas.

Los ejemplos son extensos, pero hay marcas que han logrado dejar huella. Maybelline apostó por la creatividad y el bienestar individual y mental de cada uno con stands en el Primavera Sound de Madrid y Barcelona en 2023; en ese mismo año Mistercorn concienció sobre la importancia de la protección y las seguridad en las relaciones sexuales en el Arenal Sound, y San Miguel retó a los asistentes del Bilbao BBK Live a ser ellos mismos en 2024.